Los incentivos aumentan la sospecha de que el Gobierno de Boris Johnson no está haciendo todo lo posible para ayudar a los ciudadanos europeos a afrontar los trámites necesarios para solicitar la residencia permanente, todo lo contrario.
El gobierno británico ha convertido discretamente a los europeos en el objetivo de su plan para ofrecer incentivos económicos a los inmigrantes para que regresen voluntariamente a sus países de origen, dijo el martes The Guardian. Las autoridades británicas están disponibles para pagar los vuelos de regreso y hasta dos mil libras (equivalentes a 2,26 mil euros) en asignaciones de reasentamiento, unos cinco meses antes de la fecha límite para que los europeos soliciten la residencia permanente.
Los incentivos aumentan la sospecha de que el gobierno de Boris Johnson no está haciendo todo lo posible para ayudar a los ciudadanos europeos a afrontar los trámites necesarios para solicitar la residencia permanente, todo lo contrario. “Es evidente, al observar nuestro análisis de los casos, que algunos de los ciudadanos de la UE más vulnerables aún tienen que resolver su estado”, señaló Benjamin Morgan, director del Centro de Derecho de Interés Público. “Los obstáculos para la presentación de solicitudes y los retrasos en las decisiones del Ministerio del Interior siguen siendo factores importantes”, añadió al diario británico. Cualquiera que no rectifique la situación o no acepte la oferta del gobierno británico de salir del país corre el riesgo de ser arrestado, perseguido por trabajar o que le impidan cosas tan simples como alquilar un coche.